Día 11: Winter is coming - El Muro de Adriano
Miguel Julián
por Miguel Julián
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El día de hoy estaba marcado en el calendario. No tanto el día (31 de agosto? lunes? no tengo ni idea en qué día vivo) sino lo que iba a hacer: andar por el Muro de Adriano. Y eso no es nada fiel a las low expectations que predica mi amigo el Sr. A2. Así que he madrugado un poco, he desayunado un combinado de fruta en el autobús y con una de esas maravillosas ofertas de “si compras dos bebidas te robamos menos”, llevaba mis dos Powerade en la mochila (y otro litro de agua, claro) y me he metido en un tren rumbo a Hexham.

La idea era pillar “el autobús del muro” dejarlo en un punto que me habían recomendado (Housesteads?) y andar hasta otro segundo punto en el que el bus de vuelta me recogería. Allí en Hexham me he enterado que si comprabas bus y tren a la vez te hacían descuento. Pero bueno, cosas “inevitables” de persona que las hace por primera vez.

Al final el muro no es demasiado impresionante, es cierto que hay algunos lugares donde impresiona verlo subir y bajar las colinas, pero el gran defecto es que la parte que se ve no es muy alta……..

La caminata ha ido bien, muchas cuestas, es difícil saber dónde estás sin un buen mapa porque las indicaciones tampoco es que sean tantas, y varios caminos (todos hacia la misma dirección) se van juntando. La verdad es que ha sido un re-encuentro con las caminatas propiamente dichas, he acabado con pies y piernas echando fuego (cosas de las cuestas). Me lo he tomado con tranquilidad, saludando a la gente (qué majos) y ayudando, por ejemplo a un abuelico que no sé qué narices hacía ahí… pero bueno, con la ayuda de otro chaval y la mía ha bajado el último (y más difícil) cacho.

Al final he desistido en llegar al destino que me había marcado (cuestas y fotos retrasan mucho el ritmo) y he bajado a la carretera para volver un poco sobre mis pasos y desviarme a ver una fortaleza romana sobre la que están trabajando (en directo) los arqueólogos. No me acuerdo del nombre (Valutopia o algo así, ni de coña) la verdad es que merece la pena, es bastante amplia y sorprende ver eso tan “en el norte de Europa”.

Hoy toca ser un poco escueto, pero es que vamos a ver si el frío no se nos come y podemos seguir con la cata de sidras :-)

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